Blogia
Mirando a...

Rebuscar euros en la basura

La última ’Botellada’ (dicesé de todas aquellas ideas más o menos sensatas surgidas de la ex-mujer de Che Mari Aznar) ha sido aumentar el número de personas encargadas de rebuscar (analizar le llaman desde el Ayuntamiento) en las basuras de los ciudadanos para ver si separan correctamente, etc.

El caso es que, lejos de hacer esto, yo que sé, por un fin estadístico, como forma de advertir a ciertos vecinos de que deben reciclar... pues no, la medida incluye una bonita sorpresa, multas que irán hasta los 750 euros, a pagar por un vecino en concreto (si encuentran una carta o dirección entre sus residuos) o por la comunidad de propietarios a la que correspondan esos cubos.

Ahora bien, tengo mis dudas acerca de si, lo de abrir bolsas de basura para mirar en su interior es del todo legal. Además, en muchas comunidades de vecinos, los cubos están en la calle y, ¿qué ocurre si, alguien que va por la calle, tira lo que sea en los cubos correspondientes a tu comunidad? En ese caso, los vecinos, que pacientemente separan en sus casas de 50 m2 el papel, el vidrio, los residuos orgánicos y los envases (nace el nuevo salón-cuarto de basuras), deberían de pagar, además, la multa impuesta por alguno de los 300 ’rebuscadores’.

 

También defienden desde el consistorio que, aquellas casas del Centro que no tienen cubos amarillos, han de buscar un ’iglú’ situado a unos 50 metros del domicilio, es decir, que te bajas por la noche en pijama y, ya que estás, te das una vuelta por Tribunal y te tomas algo... así da gusto. Será en estas mismas zonas cuando, tras una noche de viernes o sábado, cuando aparecen las calles como aparecen, dirán los rebuscadores: -Uy... me han mezclado en el mismo cubo las litronas, librillos de papel, paquetes de tabaco y un trozo de kebab... ¡que casa más desorganizada! y una multa para que usen cubos con candado (o similar).

Dicen que no es con afán recaudatorio, y debe ser verdad por que la susodicha Botella se ha gastado 400.360 euros en su sede municipal en concepto de fachada (no es un chiste fácil es que es lo que van a arreglar). Por tanto, sólo queda pensar que será un paso más en su cruzada de no mezclar botellas con restos de comida, una idea muy en línea con la ya conocida de las peras y las manzanas.

0 comentarios